viernes, 31 de diciembre de 2010

EN RECUERDO DE LOS QUE NOS DEJARON EN EL 2010

SE NOS FUERON MUCHOS PERO ENTRE ELLOS DESTACAMOS A LOS SIGUIENTES:

Enrique Morente, alma del "quejio" andaluz en su anhelo por la libertad de su tierra. 

 
Jose Antonio Labordeta, honestidad, pura verdad sin requiebros, y un gran epitafio: ¡a la mierda! dirigido a la bancada de los neofranquistas, pero que también se la hubiera expresado a los cortijeros del post-franquismo oportunista que soportamos en Andalucía. Que su canto a la libertad sea realidad alguna vez en Andalucía al igual que dice nuestro himno.



Marcelino Camacho, luchador incansable en defensa de los trabajadores, honrado y sencillo. Murió con la misma humildad con la que vivió en su barrio de siempre, Carabanchel, junto a la prisión, "su otra casa".  Y nos dejó un mensaje extraordinario en sus últimas palabras: "Si uno se cae, se levanta inmediatamente y sigue adelante". 

Aunque mayor tristeza que su muerte, es la lenta muerte sindical de CC.OO desde que unos pocos vendidos se instalaron con el poder, robando las CC.OO de verdad, las que el construyó, las que lucharon contra las injusticias, las que todos conocimos.


José Saramago, escritor y humanista, premio novel de literatura. Nos enseñó el valor de la palabra y de la lectura en unos tiempos de vulgaridad colectiva. Nunca olvidó su origen humilde en un pueblo del Alentejo portugués, y siempre con su verbo ágil y providencial replicó a los poderosos porque no se doblegó jamás. 



Tampoco no podemos olvidar de Miguel Delibes, Luis García Berlanga, Luis Mariñas, Manuel Alexandre, José Vidal-Benyto y tantos otros que nos enseñaron la vida, pero sobretodo, a amar la libertad y a rebelarnos contra la opresión. A todos, simplemente gracias.